Hoy queridos amigos os vamos a hablar de una canción muy amena e interesante que además desestresa, con el objetivo de que entendáis aquí y ahora lo importante que es cuidar nuestras manos en el día a día:
nuestras uñas… ¿cómo llevarlas? Las mujeres por naturaleza siempre tenemos unas manos muy bonitas: delgadas o rellenitas, blancas o morenas, pequeñas o de pianista (jajaja). ¿Qué son las manos de un, o de un pianista?… Pues de dedos largos y muy buenos para tocar el piano y con eso… ¡el alma! Nuestras manos no son exigentes, a veces se conforman con un poco de agua, jabón, crema y cariño. ¡Ah!… pero nuestras queridas uñitas son muy exigentes: «Oye, estamos creciendo», «No nos cortes mucho, duele», «Ay, me lastimaste la cutícula», «Estamos más bonito con ese otro color”, “No nos rasques que nos llenas de bichos”, “No escribas tan rápido en el teclado, se rompe”, “Saca la basura, quedo sucio”, “Gira lentamente, me vas a sangrar», etc.
La forma de tus uñas
¿Y qué dice de nosotros la forma de las uñas? Hay hasta 7 tipos de formas de uñas y cada una marcará una personalidad diferente.
Primero están las uñas largas y rectangulares, lo que implica que la personalidad es alegre y segura de sí misma. Además, son personas a las que les gusta ver mundo y tener nuevas experiencias. No solo eso, también son meticulosos y se esfuerzan por hacer siempre lo correcto.
Uñas largas
Por lo general, a un hombre le seducen las uñas largas. Tal vez porque está en la imaginación de una mujer seductora, esa que tantas veces han visto en las películas. Las uñas largas son como las garras de un felino y muestran a una mujer «depredadora» y apasionada. Mi consejo es que no exageres el largo de las uñas, porque tampoco es recomendable para dar un look poco elegante o hortera: uñas de largo medio que crean el efecto de que los dedos son más delgados y largos y le dan a tus manos un aspecto estiloso solo luce.